¿Qué es la Uveítis?

La uveítis es una inflamación que afecta a la túnica vascular del globo ocular, conocida como úvea, que está compuesta por el iris, el cuerpo ciliar y la coroides. Esta inflamación también puede afectar a otras partes del ojo, como la córnea, el nervio óptico, los vasos sanguíneos y la retina. 

Esta enfermedad puede presentarse tanto en perros como en gatos, sin importar la edad, y puede afectar a uno o a ambos ojos. En la mayoría de los casos, determinar la causa exacta requiere un protocolo de diagnóstico exhaustivo que incluye una evaluación integral por parte de un especialista para descartar enfermedades sistémicas, como puede ser la Leishmaniosis. 

Aunque la mayoría de los casos de uveítis pueden tratarse y controlarse, es crucial comenzar el tratamiento lo antes posible para evitar complicaciones. En los casos más graves puede darse la pérdida de visión y ésta podría ser irreversible. 

Según la zona afectada, la uveítis se clasifica en tres tipos: 

• Uveítis anterior: cuando solo se inflama el iris, o el iris junto con el cuerpo ciliar. 
• Uveítis posterior: donde únicamente se inflama la coroides. 
• Panuveítis: afecta toda la úvea, incluyendo el iris, el cuerpo ciliar y la coroides. 

¿Qué síntomas presenta?

Los síntomas pueden manifestarse de forma repentina y empeorar rápidamente, aunque en algunos casos, pueden aparecer de manera gradual. A veces, los signos de uveítis solo son detectados durante un examen oftalmológico exhaustivo. 

Entre los síntomas más frecuentes destacan: 

• Cierre de los párpados o blefaroespasmo. Los músculos que rodean al ojo se contraen de forma espástica. 
• Fotofobia o sensibilidad a la luz. 
• Lagrimeo excesivo. 
• Cambios en la apariencia del ojo. Se puede ver una opacidad que le da un aspecto turbio al ojo. 
• Enrojecimiento de la conjuntiva u ojo rojo. Es muy común confundir uveítis con conjuntivitis. 
• Miosis o contracción de la pupila. 
• Baja presión intraocular.

Recuerda, es fundamental tratar la uveítis a tiempo para evitar secuelas permanentes. 

¿Qué tratamiento tiene?

El tratamiento va enfocado a reducir la inflamación, aliviar el dolor y prevenir las posibles secuelas. Suele incluir el uso de antiinflamatorios, inmunosupresores y/o midriáticos-ciclopléjicos para controlar la inflamación y evitar complicaciones, además de corticoides en ciertos casos y colirios específicos para el ojo afectado. Si la uveítis es causada por una enfermedad subyacente o una infección parasitaria, se emplean medicamentos para tratar el agente infeccioso. 

En IVeM contamos con herramientas diagnósticas avanzadas para la evaluación y el seguimiento de esta enfermedad en nuestros pacientes. Si crees que tu animal puede padecerla, pide cita para realizar una revisión.